Las mejores personas siempre llegan en los momentos menos esperados, o al menos es lo que suelo creer. Aun con todo y los conflictos que haz generado en mi vida puedo decir que llegaste en el mejor momento, eres lo que necesitaba justo en esta etapa de mi vida, esa luz que me hacía falta, esa inocencia que había perdido, ese lado infantil que había olvidado.
Me ayudas a recordar lo sencilla que es la vida cuando dejo de encontrarle sentido a la misma, que una sonrisa si basta para hacerlo todo más fácil, que el creer que se puede si ayuda cuando piensas que todo va mal, y que querer tanto no significa que debes salir lastimado.
Y a pesar de que no se si llegaste para quedarte o solo estas de paso me haces tener esa confianza para entregarme a ti sin pensarlo, parar querer mostrarte la mejor de mis facetas, para quererte sin condiciones, sin prejuicios, sin limitantes. Porque mis miedos se olvidan cuando me tomas de la mano, porque las diferencias desaparecen cuando me miras a los ojos, porque mis conflictos se esfuman cuando me dices que me quieres, porque mis ganas de quedarme crecen tan solo con verte.